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Manuel Domínguez·4 de abril de 2020
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Manuel Domínguez·4 de abril de 2020
La cláusula de Unai Núñez pasa de apetecible a difícil tras la crisis del coronavirus.
No hay mal que por bien no venga o mirar el vaso medio lleno son algunas de las costumbres del aficionado de a pie en su día a día durante la temporada.
Aún con el fútbol parado, algunos medios tratan de sacar aspectos positivos hasta de las circunstancias más negativas, como es la pandemia que se vive actualmente a nivel mundial y que ha dejado a los aficionados al deporte rey sin pelota durante ya casi un mes.
Uno de los puntos más curiosos relacionados con la actualidad del Athletic ha sido el “blindaje” de Unai Simón que, el coronavirus, ha hecho de forma involuntaria para benficio del cuadro rojiblanco.
Con una crisis económica brutal que ya ha comenzado a afectar a clubes que se han acogido a ERTES o reducciones salariales, parece complicado que el libre albedrío del mercado de fichajes continúe, al menos, durante este verano, por lo que el Athletic podría asegurarse la presencia de su central en Lezama, un año más, si nadie se atreve a desembolsar los 30 millones de su cláusula de rescisión.